No hubo crimen federal en el caso de la soga de ahorcar localizada en el garaje de Darrell ‘Bubba’ Wallace Jr., único piloto afroamericano de NASCAR, durante la carrera celebrada en Talladega (Alabama), el pasado 21 de junio.
La agencia de investigación criminal del Departamento de Justicia estadounidense considera que Wallace “no fue objetivo de un crimen de odio”.
Mediante un despacho de prensa, NASCAR señala que tanto el reporte del FBI como la evidencia fotográfica, indican que “la cuerda [colgada] de la puerta del garaje, diseñada como un lazo, se había colocado allí desde el otoño pasado“, mucho antes de que el lugar fuese asignado al equipo de la competencia.
— NASCAR (@NASCAR) June 23, 2020
NO FUE UN ACTO RACISTA
Añade el comunicado:
Estamos agradecidos de saber que no fue un acto intencional y racista contra Bubba.
Nos mantenemos firmes en nuestro compromiso de proporcionar un ambiente acogedor e inclusivo para todos los que aman las carreras.
El día en que se denunció el incidente, el piloto mostró su apoyo a las protestas antirracistas desatadas tras el asesinato de George Floyd y lució en el circuito una camiseta con los lemas “I Can’t Breathe” y “Blacklivesmatter”.
— Bubba Wallace (@BubbaWallace) June 7, 2020